
Se llama Ilustración al movimiento cultural que modificó la manera de pensar sobre el hombre, la naturaleza y el universo, basado principalmente en la razón y la experiencia humana. Se desarrolló con plenitud en Francia hacia el siglo XVIII.
Con esta actitud intelectual se realizó la crítica al absolutismo de los monarcas y al principio del origen divino de su poder. Se criticó también el pensamiento dogmático, la superstición y el fanatismo de la iglesia como el orden feudal de privilegios.
La Ilustración también fue denominada "siglo de las luces". Se caracterizó no sólo por su crítica de las instituciones del antiguo régimen, sino por la difusión del conocimiento basado en la experiencia y en la razón para liberar todos los aspectos de la vida sometidos a la teología. Esta actitud intelectual procede de las aportaciones de el Renacimiento, cuando se reflexionó sobre la condición humana y sobre los avances científicos del siglo XVI y XVII: los de Copérmico, Bacon o Newton; y del gran impulso que la burguesía imprimió a las actividades económicas para que el capitalismo se desarrollara.
El racionalismo
La Ilustración se vio influida por la corriente filosófica denominada racionalismo. Ésta tomó como base a la razón humana para conocer y resolver todos los problemas relacionados con la sociedad. Buscó conocer las leyes de la naturaleza para que sirvieran de guía en la consecución de la justicia y bienestar social.
La razón confirió al hombre el poder de conocer el mundo por sí mismo, criticar las injusticias de los gobiernos despóticos, privilegios sociales, la corrupción o el dogmatismo y la posibilidad de liquidar el pensamiento medieval.
El racionalismo surgió hacia el siglo XVII. Su planteamiento básico consistía en sostener que la razón era la única fuente de conocimiento. Su principal apoyo lo obtuvo del desarrollo espectacular alcanzado por las ciencias matemáticas.
Su principal exponente fue René Descartes (1596-1650), gran matemático, físico y filósofo, autor de la obra El discurso del método. En ella plantea la famosa "duda metódica" en la cual se plantea la duda del hombre con respecto a los conocimientos adquiridos y no los acepta hasta estar seguro de su veracidad. Para ello se servía, también, de las ideas innatas con las que nacía y que desarrollaba mediante el uso de su razón. Fue tan importante el impacto del empleo de la razón que se constituyó en fundamento de la existencia humana; de ahí la frase: "pienso, luego existo".
La finalidad histórica del racionalismo fue el adquirir conocimientos válidos para transformar la naturaleza en su propio beneficio, desarrollar la ciencia y la técnica; y comprender al hombre, a la sociedad, a la naturaleza y al universo.
Los derechos del hombre, la teoría del contrato social y su significado político
Los ilustrados, influidos por el racionalismo en boga iniciaron el estudio de la sociedad. Afirmaban que todo lo existente en ella está regido por un orden natural, es decir, en la naturaleza existen leyes y el hombre como parte de esa creación estaba sometido a las leyes naturales que constituyen el "Derecho natural".
Se establece que los derechos del hombre son: la libertad, la igualdad, el trabajo, la propiedad, la justicia, la vida, la tolerancia religiosa, etc. Para el cumplimiento de estos derechos era necesario el establecimiento de un Contrato Social entre la sociedad y el Estado. Sólo así se garantizaba y respetaban los derechos de la sociedad.
El significado político de este pacto social es múltiple: limita el ejercicio del poder, establece un gobierno democrático, afirma la soberanía del pueblo, pues en el hace residir el poder, busca la armonía entre la autoridad estatal y los derechos individuales y los medios para eliminar la monarquía absoluta.
Los ilustrados
LAs ideas de Locke, Montesquieu, Voltaire y Rousseau fueron las más conocidas y difundidas en el Estado moderno.
John Locke (1632-1704), filósofo inglés, iniciador de la ilustración e ideólogo del liberalismo en su obra el Ensayo sobre el gobierno civil, defiende los derechos naturales como son: la vida, la libertad y la propiedad. Considera a la libertad como un derecho inalienable y defiende la igualdad entre los individuos.
Piensa que la propiedad privada surge antes que el Estado, y el trabajo, es lo que da valor a las cosas. Es el primero que plantea la necesidad de un pacto entre la sociedad y el Estado para asegurar los derechos de lo hombres y limitar el poder estatal mediante una monarquía constitucional y la división de poderes en ejecutivo y legislativo.
Charles Louis de Secondant, Barón de la Breda y de Montesquieu (1689-1755), filósofo de origen noble, en su obra El espíritu de las leyes demuestra el valor que éstas tienen dentro del Estado. Considera que ellas representan la garantía de la libertad. El medio para asegurar la legalidad reside en la separación de los poderes Legislativo, Ejecutivo y Judicial. En su propuesta el poder Legislativo, ejercido por una cámara de representantes se encargaría de elaborar las leyes; el Ejecutivo, en manos del rey y sus ministros, aplicarían dichas leyes y, el Judicial, representado por los tribunales de justicia, se ocuparía de aplicarla a quienes no respetaran las leyes. Su propósito era aniquilar definitivamente la monarquía absoluta, evitar la dictadura y mantener cierto equilibrio en el ejercicio del poder.
Francois Marie Arouet, conocido como Voltaire (1694-1778), pensador también de origen noble, criticó severamente el absolutismo. Perseguido y encarcelado varias veces en la Bastilla francesa. En su obra Cartas filosóficas, afirmó que mediante la razón el hombre llegaría a conocer la naturaleza y criticaría el dogmatismo. Hizo valer los derechos naturales. Señaló el valor de la libertad de pensamiento, de prensa y de conciencia. La igualdad ante la ley y el peso de la propiedad privada como elemento básico de una sociedad ordenada y la libertad para venta del propio trabajo. Propuso como ideal de gobierno el Despotismo Ilustrado.
Jean Jacques Rousseau (1712-1778) uno de los filósofos más críticos del absolutismo, de la riqueza y de la propiedad privada, consideraba a estos elementos como causantes de la desigualdad social. Defendió activamente los derechos de la libertad e igualdad. En su obra El contrato social, estableció el pacto como fórmula para eliminar el despotismo y la desigualdad a cambio de respetar los derechos. Pensaba que para garantizarlos se debía establecer un espacio democrático y de esa manera, la sociedad ejercería el principio de soberanía popular. Afirmó que en la soberanía, residía el principio del poder, que éste proviene de la voluntad de los ciudadanos y representa el poder general inviolable. Esto significa que el gobierno queda sujeto a la voluntad general.
Con la teoría del Contrato social y las ideas políticas de los Ilustrados se conformó la ideología básica de las revoluciones burguesas europeas y de los movimientos independentistas de América. Mediante ella se pugnó por el establecimiento de gobiernos republicanos o monarquías constitucionales para combatir las instituciones medievales.
La Enciclopedia
La Enciclopedia o Diccionario razonado de las ciencias, de las artes y de los oficios fue una obra organizada por Denis Diderot y D'Alembert entre los años 1751 y 1772; se encontraba conformada por 34 volúmenes y recopiló el conocimiento desarrollado en las ciencias, en el pensamiento filosófico, el quehacer artístico, el uso de instrumentos y la aplicación de los diferentes oficios del artesano.
La Enciclopedia representó el instrumento privilegiado de difusión del conocimiento ilustrado: de las ideas de Montesquieu, Voltaire, Rousseau, Diderot, Buffon, Helvetius y muchas más; expuso además el nuevo pensamiento económico fisiocrático y liberal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario